Especial/Pluma Negra
Orizaba, Ver.- La montaña más grande de México, es un gran atractivo invernal para los montañistas que pueden disfrutar desde la espectacular vista en el ascenso al cono de 5,600 metros sobre el nivel del mar, o sus faldas con rutas y centro ceremoniales prehispánicas de la cultura Azteca, cuevas y pintura rupestres, cascadas, barrancas, lagunas, abetos centenarios y la nieve a partir de los 3,500 metros.
El Parque Nacional Pico de Orizaba decretado por el Presidente Lázaro Cárdenas del Río, a pesar de que sufre un estrés ambiental por la deforestación, incendios y cambio climático, es un gran atractivo para los amantes de la montaña y está bajo el resguardo de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas.
Además los guardianes de la montaña, Grupos de Brigadas Contra Incendios, realizan trabajos de conservación y vigilancia para auxiliar al turismo en caso necesario y consciencientizar sobre la importancia de los servicios ambientales que aporta la montaña.
La montaña cuenta con cuatro accesos para los visitantes: Cara Norte por Tlachichuca, Puebla con parajes como El Calvario, Piedra Grande y el Albergue Augusto Pelet, en esa ruta se alcanza el agonizante Glaciar JAMAPA y lo frecuentan alpinistas profesionales y es necesario equipo adecuado y guía. La ruta cuenta con centro ecoturístico con cabañas en la comunidad de Miguel Hidalgo y Costilla.
La Cara Sur tiene su acceso por Atzitzintla, Puebla y es la ruta para el ascenso al Pico más accesible desde el albergue…. Ahí se recomienda pernoctar para aclimatarse y en las primeras horas iniciar el ascenso; a quienes no ascienden existe el Valle del Encuentro, un centro ceremonial Azteca y la visita a la Sierra Negra donde se ubica el telescopio gigante que se llegar en vehículo si las condiciones del clima lo permiten
La Cara Oriental, se llega por la ruta de Orizaba-La Perla, Veracruz con cuatro centros ecoturísticos y atractivos de la Cascada Paraiso, granjas sustentables, parajes espectaculares como Pilangón, el Cañón Paso León y Cueva Negra, senderismo y amaneceres increíbles.
Cara Occidental se ingresa por una ruta de indescriptibles paisajes, desde los municipios veracruzanos de Coscomatepec y Calcahualco para alcanzar la Cara Norte y se puede bajar por Tlachichuca, Puebla. La ruta es austera y tiene acceso al Albergue Augusto Pelet ubicado a más de 4.000 mil metros sobre el nivel del mar, regularmente se puede disfrutar de la nieve.
Para acudir a disfrutar de la naturaleza de la montaña más alta de México, existen prestadores de servicio con vehículos adecuados que cobran unos 300 pesos, acudir de manera individual es posible en algunas rutas y los turistas deben cubrir una cuota de 62 pesos en las casetas de acceso, estos recursos son bonificados al mantenimiento del Parque Nacional Pico de Orizaba desde la Secretaría de Hacienda cada año.
Desde hace 10 que existe mayor atención por parte del Gobierno de México para la montaña, existe un registro de unos 13 mil visitantes con boleto pagado cada año y una mayor conciencia para evitar su contaminación.
Sin embargo, existe una afluencia aún no cuantificada por parte de los clubes de alpinistas y senderismo regionales, que con el argumento de identidad, conexión y amor a la montaña acuden a fomentar fraternidades y realizar ritos prehispánicos, sin cubrir su cuota ni registro.
El gran atractivo del Pico de Orizaba, padece momentos de crisis por el deshielo de su único Glaciar, el Jamapa, tala clandestina, incendios forestales a menudo provocados por el hombre, caza clandestina y tomas desmedidas de agua que impiden el escurrimiento a los cuerpos de agua montaña abajo.
La recomendación de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas es visitar de manera amigable la montaña, respetar al máximo la flota y fauna y no dejar fogatas encendida, por el bien todos.